Recientemente, en el segundo canal de Televisión Española se produjo un debate poco frecuente acerca de la prostitución. La configuración del debate carecía de un escenario previo de imparcialidad, ya que al inicio del programa se presentaron datos erróneos acerca del trabajo sexual y de la trata. En el debate estuvieron presentes dos trabajadores del sexo: Valérie May y Gerard. Valérie apostó por una argumentación pro derechos desde su perspectiva anticapitalista. Según esta activista, la libre elección está condicionada permanentemente por la clase socia de las personas, lo cual limita sustancialmente su capacidad de elección. No obstante, defiende el trabajo sexual como una opción válida y pide derechos laborales para las trabajadoras sexuales. Gerard, también trabajador sexual independiente, apostó por un discurso elegante y veraz que consiguió arrancar un aplauso del público, cuando reivindico el reconocimiento de la capacidad de agencia y pidió respeto para las personas que ejercen la actividad. El debate también contó con varios invitados como Javier Aroca o Bob Pop, quienes exhibiendo un desconocimiento importante del tema, oscilaron entre el abolicionismo y la ambigüedad.